Anagyris foetida o Altramuz hediondo
Anagyris foetida es una especie de planta medicinal perteneciente a la
familia de las fabáceas. Es un arbusto caducifolio, tóxico, no espinoso,
de hasta 4 m de altura (aunque normalmente no suele pasar de los 2-3
m). Presenta hojas trifoliadas, que desprenden un olor que puede
resultar repulsivo. Debe su nombre al desagradable olor que desprende al
ser frotado, así Erasmo ya nos decía: “Anagyrim ne moveas” ("no irrites al anagiris").
En el Altramuz hediondo, conviven ramas viejas muy gruesas y deformadas,
con ramas jóvenes sedosas, blanquecinas. Tiene hojas trifoliadas,
alternas, con las estípulas soldadas formando una sola. Foliolos
lanceolado-elípticos de 3-7 cm, sedosos por el envés.
Esta planta presenta la peculiaridad de ser una caducifolia de verano:
pierde las hojas al principio de la estación seca y le vuelven a brotar
con las primeras lluvias de otoño. Se trata de una adaptación a los
secos veranos mediterráneos.
Las flores están reunidas en racimos axilares, con corola amariposada de
un color amarillo verdoso, y el estandarte mucho más corto que los
otros pétalos. Los frutos parecen pequeñas algarrobas de color verde.
Florece en invierno y principios de primavera (diciembre a marzo). Otro
rasgo distintivo de esta especie es que se trata de la única planta de
polinización ornitófila documentada en Europa; algunos paseriformes como
las currucas (Sylvia atricapilla y Sylvia melanocephala) o el
mosquitero común (Phylloscopus collybita) visitan sus flores en busca de
néctar y transfiriendo eficazmente, al mismo tiempo, el polen.
Se trata de una planta de distribución mediterránea, que habita en setos
y riberas de clima suave y cálido; sobretodo en matorrales, bordes de
caminos y otros lugares parcialmente antropizados (modificados por el
hombre). Es posible que su irregular distribución se deba a que una
parte de las poblaciones silvestres sean producto del cultivo, en
tiempos pasados, de esta planta. Cuentan las crónicas que en España se
cultivaba como plantas de uso “militar” utilizada para extraer
sustancias toxicas, parecidas al curare, para ser aplicadas en flechas y
lanzas, explicando así su localización en zonas próximas a antiguas
fortalezas.
Esta planta contiene los alcaloides: anagirina, con propiedades eméticas
(provoca vómitos), y citisina, que actúa como depresor respiratorio
(administrado en dosis suficientemente elevadas, produce la muerte). Ha
sido utilizado en medicina popular como emético y antiasmático, pero su
elevada toxicidad hace totalmente desaconsejable su utilización como
remedio casero. Popularmente las hojas se han usado como purgante,
vermífugo. La semilla es laxante y emética.
Tão bonita e com uma certa dose de morte...
ResponderEliminarBeijos e flores. :)
Preciosas José Manuel, un abrazo
ResponderEliminarMuy buenas fotos como de costumbre. No he visto nunca este hediondo, e ignoro si por la sierra de Aracena se da, pero estaré atento para añadirlo a la colección
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